Cuidadores y RAM: qué ha cambiado durante la emergencia Covid-19

RAM: una "pandemia silenciosa" dentro de la pandemia ⁽¹⁾

La resistencia a los antimicrobianos (RAM) representa una grave amenaza para la salud mundial. De hecho, la incidencia, las muertes, la duración de la hospitalización y los costes sanitarios debidos a la RAM están aumentando considerablemente. ⁽²⁾

Según un análisis sistemático sobre la carga mundial de la RAM, publicado en The Lancet, se estima que 4,95 millones de muertes estuvieron asociadas con la resistencia bacteriana a los antimicrobianos en 2019. Las infecciones del tracto respiratorio inferior fueron las más mortíferas, responsables de más de 1,5 millones de muertes relacionadas con la RAM. Los seis principales patógenos implicados en la resistencia a los antimicrobianos (Escherichia coli, Staphylococcus aureus, Klebsiella pneumoniae, Streptococcus pneumoniae, Acinetobacter baumannii y Pseudomonas aeruginosa) representaron conjuntamente alrededor de 930.000 muertes. En particular, la combinación patógeno-fármaco, S. aureus resistente a la meticilina, causó más de 100.000 muertes, mientras que las otras cinco ocasionaron cada una entre 50.000 y 100.000 muertes. ⁽²⁾

Comprender la gravedad de la resistencia a los antimicrobianos y las combinaciones clave de patógenos y medicamentos es crucial para tomar decisiones estratégicas a largo plazo, especialmente cuando se implementan programas para el control y la prevención de infecciones, el acceso a antibióticos esenciales y la investigación y el desarrollo de nuevas vacunas y medicamentos. Además, es necesario mejorar e incrementar las actividades de los laboratorios de microbiología, principalmente en las regiones más pobres del mundo, e implementar sistemas adecuados de recopilación de datos para lograr un mejor entendimiento de la RAM. ⁽²⁾

Educar cuidadores y pacientes acerca de la resistencia a los antimicrobianos desde la perspectiva One Health ⁽³⁾

Las infecciones asociadas a la atención sanitaria debidas a bacterias resistentes a los antibióticos son un desafío cada vez más grave para la atención sanitaria moderna. El uso irracional de antibióticos (tanto por parte de profesionales sanitarios como de pacientes) lleva a un aumento del riesgo de propagación de la resistencia a los antimicrobianos. Hasta los que se denominan "antimicrobianos de último recurso", como la vancomicina, se están volviendo cada vez menos eficaces en el tratamiento de enfermedades infecciosas. ⁽³⁾

La educación desempeña un rol esencial en la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos. En 2018, el Health Education Department del National Health Service británico publicó un informe sobre las prioridades educativas, distinguiendo dos niveles: la educación de los estudiantes de medicina y otras profesiones sanitarias y la educación a nivel comunitario (escuelas, profesionales no sanitarios, etc.). ⁽³⁾

La educación universitaria, que es la vía primaria para formar a los profesionales sanitarios sobre la administración de antimicrobianos, debe fortalecerse mediante programas de educación continua. Algunos estudios también muestran que un PIB per cápita alto y una buena educación se asocian con el desarrollo de una mayor resistencia, puesto que una educación más elevada se correlaciona con un mayor uso de antibióticos. En consecuencia, la educación sobre la RAM es relevante y debería ser diseñada para que se informe mejor a los ciudadanos. ⁽³⁾

El enfoque One Health en materia de resistencia a los antimicrobianos aborda las limitaciones de la educación genérica y promueve métodos más específicos. Este proceso incluye varias disciplinas (medicina, biología, ciencias sociales, educación, etc.) que deben operar en sinergia para lograr mejores resultados en el campo de la salud pública. En otras palabras, se trata de una estrategia colaborativa, multisectorial y transdisciplinaria según la cual ningún sector u organización puede enfrentar la cuestión de la resistencia a los antimicrobianos de manera individual. ⁽³⁾

La educación sobre la RAM a partir de la escuela apunta a formar adultos bien informados que sepan comprender el riesgo y plantear preocupaciones legítimas sobre la prescripción excesiva de antibióticos por parte de médicos o profesionales sanitarios. ⁽³⁾

Entre las varias actividades realizadas desde la perspectiva One Health-RAM, dirigidas no solo a los estudiantes sino también al público, las interacciones entre niños, padres o pacientes-cuidadores ofrecen oportunidades únicas para reforzar el aprendizaje sobre la resistencia a los antimicrobianos. Por ejemplo, puesto que las enfermedades infantiles suelen tratarse con antibióticos, se han propuesto programas educativos sobre el uso de estos fármacos también para padres/cuidadores. Tanto los cuidadores como los niños, además de los pacientes adultos, deben ser educados mediante sesiones interactivas de formación de fácil lectura, folletos y materiales educativos impresos o electrónicos. Los principales puntos de atención son: conocimiento de agentes infecciosos o microorganismos, sus vías de propagación, prevención y uso racional de antibióticos para enfermedades bacterianas, pero no virales. ⁽³⁾

La RAM durante la pandemia de Covid-19 y la perspectiva del paciente ⁽⁴⁾

Hasta el día de hoy, el impacto del COVID-19 en la resistencia a los antimicrobianos es un tema de debate científico y la "voz" del paciente aún no ha sido analizada. ⁽⁴⁾

Según un estudio de 2021 publicado en JAC-Antimicrobian Resistance que examinaba pacientes que habían tomado antibióticos como parte de su tratamiento para COVID-19 y observaba su nivel de conciencia sobre la resistencia a los antimicrobianos, la primera evidencia de los bajos niveles de conocimiento sobre la RAM provino de varias organizaciones de pacientes de COVID-19 contactadas por los investigadores. De los más de 100.000 pacientes que participaron en este estudio, sólo tres manifestaron su disponibilidad a tratar el tema de los antibióticos. Entre ellos, dos tenían una base científica y un historial previo de utilización de antibióticos, mientras que uno había recurrido a los antibióticos como medida preventiva para responder a los síntomas de COVID-19. Los pacientes también mencionaron que se volvieron conscientes de los riesgos y beneficios potenciales asociados con los antibióticos solo después de haberlos tomado, ya que la información proporcionada por los médicos y profesionales sanitarios había sido mínima. ⁽⁴⁾

El resultado del estudio mostró que si los pacientes hubiesen tenido un mejor conocimiento y conciencia de los riesgos de la resistencia a los antimicrobianos, probablemente habrían formulado más preguntas al médico. ⁽⁴⁾

RAM y Covid-19: sugerencias para pacientes y cuidadores

Garantizar la administración de antibióticos a los pacientes con COVID-19 únicamente en el caso de infecciones bacterianas secundarias confirmadas es de suma importancia para desacelerar la tasa de resistencia a los antimicrobianos (RAM). Aunque se dispone de directrices clínicas y recomendaciones para los profesionales sanitarios sobre las prácticas de administración de antimicrobianos, no se han incorporado de forma adecuada los puntos de vista de pacientes y cuidadores. Mantener una comunicación transparente con ellos durante todo el proceso de diagnóstico y tratamiento constituye un enfoque eficaz. ⁽⁴⁾

Los pacientes, los profesionales sanitarios y el público en general desempeñan un papel esencial para mejorar la administración de antibióticos y reducir la resistencia a los antimicrobianos. Es importante reconocer que:

• Los antibióticos son medicamentos salva vidas, pero solo son eficaces contra infecciones bacterianas, no contra infecciones virales como el COVID-19.
• Los pacientes deben monitorear atentamente sus síntomas y consultar a su médico para confirmar una infección bacteriana antes de requerir cualquier tipo de antibiótico (y deberían evitar de requerir antibióticos a menos que su médico tratante lo considere necesario).
• Los antibióticos sólo deben usarse cuando los prescriba un médico.
• Cuando se prescriba un antibiótico, es fundamental seguir las instrucciones para el tratamiento.
• Concientizar y educar a amigos, familiares y comunidades sobre los riesgos asociados con la resistencia a los antimicrobianos y participar en iniciativas colectivas son pasos esenciales para prevenir el uso innecesario de antibióticos. ⁽⁴⁾

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